Stark denuncia agresiones en medio del caos
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"Tuve miedo", contó Stark al tribunal deportivo de la DFB, que discute si mantiene el empate 2-2 que significó el ascenso a Primera del Fortuna y el descenso del Hertha o si ordena repetir el partido por los graves incidentes que se produjeron al final.
El encuentro celebrado este martes en Düsseldorf tuvo que ser interrumpido cuando estaba por terminar porque miles de aficionados locales asaltaron el campo con bengalas. Tras 20 minutos de pausa, Stark hizo jugar los que faltaban. Varios jugadores del Hertha recriminaron al árbitro que reanudara el partido y el club pidió repetirlo al considerar que sus futbolistas no podían jugar en esas circunstancias.
Stark, uno de los internacionales que dirigirá en la Eurocopa de Polonia y Ucrania, dio una versión diferente de lo ocurrido y aseguró que cuatro o cinco jugadores del Hertha intentaron asaltar el vestuario de los árbitros tras el partido."El jugador (Lewan) Kobiaschwili intentó golpearme. Me agaché a tiempo y recibí el golpe en la nuca", relató el árbitro. "Si no hubiese llegado a agarrarme de una barandilla habría caído cinco metros por una escalera". Otros jugadores lo tomaron del brazo y lo insultaron, añadió.
La comisión de control de la DFB abrió un expediente a Kobiaschwili, Christian Lell, Thomas Kraft y Andre Mijatovic.
El presidente del gremio, Hans E. Lorenz, aclaró sin embargo que la sesión de este viernes no se ocupó de ese tema, sino de evaluar el partido y decidir si hay que repetirlo. En un principio se esperaba que la DFB adoptara una decisión, pero después de tres horas de tomar declaración a las partes, Lorenz aclaró que tal vez haya que esperar a los próximos días.
Invasión de campo
El ambiente vivido durante todo el Fortuna-Hertha fue muy intenso. Los futbolistas estaban a tope, corriendo, luchando, a veces un poco agresivos. Stark estuvo calmado con las tarjetas por estar consciente de la intensidad que se vivía. Pero no fue solo en el campo.
En las gradas, 54.400 corazones también estaban sobrerrevolucionados. Y en algunos, como siempre los más desadaptados, se hizo notar. Tras el segundo gol del Düsseldorf, los ultras del Hertha lanzaron numerosas bengalas al terreno de juego, lo que lo detuvo brevemente. Después, a lo largo del partido, por parte de ambas aficiones se vieron cosas similares, pero nada demasiado preocupante.
Fue cerca del final, tras el empate 2-2 de Raffael a falta de cinco minutos, que los nervios y la ansiedad de los seguidores del F95 crecieron. A medida que se acercaba el final, la emoción movía a los fanáticos hacia los jugadores. Se lanzaban al campo y se quedaban a la espera del pitazo final, así como en el fútbol de otrora, o de categorías no profesionales.
Siete minutos de prolongación eran demasiados para que el público sobre excitado pudiera contenerse. Era la vuelta a la 1.Bundesliga tras 15 años. Seguía pareciendo cerca del gol el equipo berlinés.
Fue a falta de apenas algo más de un minuto que la euforia estalló y todos empezaron a saltar al campo y a celebrar cerca de los jugadores, quienes junto con el cuerpo arbitral decidieron irse hacia la zona mixta mientras el cuerpo de seguridad del estadio retomaba el control de la situación. Muchos no entendían si se había pitado o no el final.
Pero no, Wolfgang Stark esperaba terminar el partido. Tras varios detenidos, césped arrancado del campo, más bengalas y fuegos artificiales, los encargados de la seguridad sorprendentemente recobraron paulatinamente el control de la situación. La voz del estadio y el marcador pedían a todos volver a sus sitios.
Así, Stark y su equipo volvieron, así como también el Fortuna. El Hertha, a pesar de tardar, también regresó a jugar su última y desesperada opción de salvarse.
No lo lograron y tras casi 30 minutos de tiempo añadido se hizo oficial el ascenso de Düsseldorf.
¿Oficial? Todavía no está decidido. Es muy de esperarse que los responsables de los lamentables hechos vividos en el ESPRIT Arena sean sancionados, por lo que la directiva del Hertha, ni corta ni perezosa, se aprovechará de esto para denunciar el partido ante la DFB y tratar de conseguir una última esperanza para que, o el F95 pierda el partido o que se repita. Ya que no pudieron con fútbol, tratarán hacerlo “en las mesas”. Sinceramente dudo que sea posible pero tampoco quisiera que pasara. Ya veremos cómo termina esto.
Fuentes: sport.es/ mibundesliga.com
Comentarios
#1
¿Se trata de Tony Stark, el mismísimo Ironman?