Más sobre besos: uno al árbitro y después de ser expulsado

Esta semana nos hacíamos eco del malestar de la Federación Mexicana sobre la celebración de un gol de dos jugadores del América, que simularon un beso. A medio camino entre esta acción y la de aquel jugador del Toledo que abrazó a un árbitro en España, encontramos esta imagen de hace un año del entrenador del Rapid de Bucarest.

Después de vivir el partido con el corazón a mil por hora, celebró el gol de la victoria entrando en el campo y lanzándose sobre el césped. El árbitro lo expulsó y entonces, no se le ocurrió otra cosa que darle un beso, ante la sorpresa del juez que se lo quitó de encima como pudo.