El árbitro frena un pique y la madre de uno de los jugadores lo zarandea
- Inicie sesión o regístrese para enviar comentarios
- 3.388 lecturas
Lo que no debe pasar nunca en un estadio de fútbol ocurrió ayer en el Castañal, durante el partido que enfrentó al Selaya y al Colindres. Fue al filo del descanso, cuando el jugador local Gedeón y el visitante Quique mantuvieron una acalorada discusión sobre el césped. El enfrentamiento, lejos de mitigarse con el fin del primer tiempo, continuó de camino al vestuario. El árbitro Rodríguez Ferreras fue testigo del pique de los dos futbolistas y decidió poner remedio al asunto.
Sin embargo, no había acabado el colegiado de abandonar el campo, cuando la madre del jugador del Colindres lo agarró por el pecho y lo zarandeó. Tras este ataque, Rodríguez Ferreras decidió suspender el partido hasta que llegase la Guardia Civil. Media hora después, con la aparición de la benemérita, se reanudó el choque, con la expulsión de ambos jugadores, que recibieron el castigo en los propios vestuarios.
La agresora del árbitro, no obstante, siguió viendo el partido sin ningún tipo de problemas.
Fuente: eldiariomontanes.es
