Otro traidor efecto óptico y un gol fantasma de risa

El delantero del KRC Genk, Herve Kage, se había mandado un jugadón ante el Lierse SK por la Liga Pro deBélgica. Tras lanzar un violento remate, que pegó en el palo y rebotó fuera de la línea del arco, se lamentó por no convertir el gol.

Sin embargo, el árbitro del partido validó el tanto ante la incrédula mirada de los jugadores y del público presente. El futbolista comenzó a celebrar sin verse muy convencido por lo ocurrido.

Finalmente el equipo belga terminó ganando el partido por 3 a 0, pero el chascarro referil revivió el debate por la urgencia de aplicar nuevas tecnologías en el fútbol.