La precipitación y el efecto óptico convierten un gol en córner

Es la jugada de risa del día, la que cuando el árbitro y el asistente la vean pedirán que la tierra les trague. Jugaba el Kortrijk contra el Genk, de la Liga belga, cuando se dio esta jugada.

El balón hace un extraño y cae en picado sobre la meta. Al asistente le despista por completo, aun teniendo una buena situación, y levanta la bandera. Sin embargo, el balón no sale. Hay gol en el rechace, pero el asistente ya tenía la decisión tomada. El árbitro no lo desautorizó el saque de esquina.

El efecto óptico fue muy traidor, pero el asistente se precipitó. ¿Qué prisa hay por señalar que el balón ha salido?