Del ejemplo de los papás a la agresión de un benjamín al árbitro

El deporte base es maravilloso en sí mismo, pero semana tras semana algunos violentos, papás "hooligans", lo ensucian con sus conductas. Es una epidemia que crece año a año. Hace décadas, el problema de la violencia estaba en el deporte "senior". Hoy se ha trasladado a los partidos de los jóvenes.

Posiblemente ya habéis visto este combate de lucha libre entre dos aficionados (al parecer, padres de jugadores), en el partido de División de Honor juvenil del grupo canario entre Telde y Guía. Al principio, nos parecía increíble que nadie acudiese a separarlos, pero al final casi es lo mejor. Espectacular la reacción de los jugadores, que siguen a lo suyo sin inmutarse.

Los padres también fueron los responsables de una nueva agresión al árbitro, según cuenta El Heraldo. En el día que volvía a dirigir un partido el árbitro Fahd Abbou, agredido brutalmente en un partidode Primera Regional hace un mes, un nuevo episodio de violencia en el fútbol base aragonés se ha cebado con el joven colegiado Truman Calvo González, que dirigía un partido de cadetes, que fue agredido por dos aficionados y empujado por una aficionada, todos ellos del conjunto de Valdespartera -club que ejercía de local.

El árbitro fue asistido en el Hospital Miguel Servet en presencia de sus padres, con un fuerte dolor en los carrillos y el cuello y asesorado por el Comité de Árbitros en todo momento, que le ofreció la cobertura legal y psicológica necesaria. El colegiado era todavía cursillista de segundo año y ha quedado muy afectado psicológicamente por la agresión sufrida en la mañana de este sábado por varias personas que, de manera cobarde, desaparecieron de la instalación rápidamente.

Con estos ejemplos de quien debían educarlos, no nos podemos hacer los sorprendidos con la noticia, que también cuenta El Heraldo, de que un jugador de categoría benjamín -ocho y nueve años- ha protagonizado una agresión al árbitro que dirigía su partido. Al término del choque que disputaban el Balsas Picarral y el Giner, de Primera Benjamín, un jugador del equipo de Torrero, según reza el acta arbitral, le dio una patada al colegiado. En diciembre, otro benjamín fue sancionado con seis meses por un  acto similiar.

El árbitro le mostró la cartulina roja, escribiendo en el acta claramente el motivo de la expulsión: “Una vez finalizado el partido, el jugador del Giner (…) me golpea en la pierna dándome una patada“. Además, el colegiado expone también en el acta “el comportamiento inadecuado del cuerpo técnico del Giner Torrero“.