De la tensión del principio al deshogo del final

¿Quién no ha sufrido el silencio de un vestuario arbitral diez minutos antes del partido? Unos muestran su nervios con cien estiramientos distintos, otros con pequeños saltos, los hay que visitan diez veces el baño. Todo queda en la caseta, pero cuando llega hasta el túnel, las cámaras nos pillan. Y aquí tenemos al asistente inglés Eddie Smart, que protagonizó un show de manera involuntaria antes de salir a la cancha para el partido entre Tottenham Hotspur y Manchester United dela Premier League.

Toda esta tensión suele terminar con el pitido final. Y es ahí cuando suspiramos y nos relajamos, cada uno a su manera. Llamativo fue el modo de Darío Herrera, que al final de un partido entre Central y Vélez, gritó al aire un "la c... de mi madre". ¿Alivio, enfado, orgullo? ¡Sólo él lo sabe!