Pedro Proença, otro grande que cuelga el silbato
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El 10 de septiembre 2000, Pedro Proença Oliveira Alves Garcia hizo su partido debut en la máxima categoría. La primera tarea del árbitro joven era un Desportivo das Aves-Campomaiorense en Vila das Aves. A los 17 minutos, Duka, un defensa, fue el blanco de una tarjeta amarilla mostrada por el árbitro de Lisboa, la primera de las ocho de la Proença mostraría. "El partido me fue mal, quedaron tarjetas sin mostrar y algunos penaltis por marcar", admitió después. Fue así que desafió por los fans de Aves Villa sólo logró salir del estadio dos horas después de la partida, con escolta policial.
Pasaron más de 14 años y Pedro Proença se ha convertido en una referencia en el arbitraje internacional, acumulando presencia en todas las grandes competiciones. Y fue el pasado jueves, cuando a los 44 años, anunció lo que era un secreto peor guardado, “una decisión tomada en conciencia": el final de su carrera como árbitro. Proença justificó la decisión con el "esfuerzo físico y mental" sufrido durante la larga carrera que tenía en el arbitraje. Por lo tanto, un poco menos de un año antes de llegar a la edad límite, el último juego de Proença carrera resultó ser un Cruz Azul-Auckland City en Marrakech, que definió el tercer y cuarto clasificado del Campeonato Mundial de Clubes de la FIFA en diciembre pasado.
"Soy consciente de que os dejo una imagen de competencia, profesionalidad y credibilidad en todos los agentes deportivos que me cruzaba. Aunque reconozco que me pude equivocar sobre el terreno de juego, soy consciente de lo que hice para mejorar mis habilidades ", dijo el ahora ex árbitro, asegurando que abandona el arbitraje “bien con todo el mundo” y no se refirió a los problemas que tuvimos en el pasado reciente con Vítor Pereira, presidente de la Junta de Arbitraje de la Federación Portuguesa de Fútbol (FPF). En su discurso, Vítor Pereira también no se refirió a estas diferencias, calificando el abandono de Proença como "prematuro".
En esta despedida, Proença se mostró satisfecho por su carrera."Estuve en competiciones extraordinarias con los actores más talentosos. Estar presente en varias finales, como la Liga de Campeones y el Campeonato de Europa, fueron días para los que yo y mi equipo trabajamos muy duro. Por cierto, va a ellos mi profundo agradecimiento ", dijo.
Proença no rechaza volver al fútbol y al arbitraje en el futuro cercano. “Estoy dispuesto a contribuir según sea necesario en apoyo del arbitraje y el fútbol portugués”, dijo. Pero su futuro inmediato, añade, que pasa por el administrador y director financiero, y dedicarse a la enseñanza académica. Considerado como el mejor árbitro portugués nunca y los mejores del mundo en 2014, Proença hizo hincapié en que es el momento de “dar paso a los nuevos valores" y ese mundo "el futuro del arbitraje portugués está asegurado."
Acudieron a la ceremonia en la sede FPF muchas personalidades del fútbol portugués, entre ellos Luís Filipe Vieira, presidente del Benfica o Bruno de Carvalho, presidente del Sporting. Muchos árbitros estuvieron presentes, como Luis Duque, presidente de la Liga del Club, Fernando Gomes, presidente de Planned Parenthood, y los jugadores viejos como Pauleta y Humberto Coelho, ambos miembros de la federación.
Árbitro desde 17 años, Pedro Proença subió a la primera categoría en el año 2000, se convirtió en internacional en 2003, con una presencia en la fase final de la Eurocopa 2012 (en el que dirigió la final) y el Mundial de 2014. De acuerdo con las cuentas de la FPF, Proença dirigido Desde el año 2000, 466 partidos, incluyendo 362 y 104 en competiciones nacionales en las competiciones internacionales. A nivel internacional, estuvo en 37 partidos en la Liga de Campeones, incluyendo la final de 2012, en Munich, entre el Bayern y Chelsea.
Fuente: publico.pt
