Colección de errores de juventud en una jugada

Cuando publicamos un vídeo en Árbitro10 en el que aparece un error del árbitro siempre nos ponemos en su lugar para entender porque este se produce e intentar explicar una vez más que somos humanos y, como tales, imperfectos. Hoy lo hacemos más que nunca, ya que esta jugada es de fútbol base y posiblemente el error sea cometido por un chaval que está empezando. Por eso, este vídeo va dirigido a principiantes, para que vean si alguna de estas cosas les puede pasar a ellos:

1. El cambio de ritmo. No se puede hablar de que el árbitro sea un pasota, ni que este caminando. Corre. Sin embargo, en el pase en profundidad, no mete otra marcha. Conclusión: no llega a la jugada tan decisiva como un mano a mano entre delantero y portero.
2. El asistente. Lo mismo, corre pero no llega. En esta jugada con el árbitro lejos, un comodín suyo podía ser de gran ayuda
3. ¿Seguro que se tira? Quien nunca se haya tragado varios penaltis de libro no es árbitro. El problema no es que no vea la zancadilla, sobre todo con los condicionantes anteriores. Pero igual que comprendemos que ante la duda no se pite, también hay que tener una seguridad muy grande para amonestar a un futbolista por simular. Siempre queda la vía del medio: no hacer nada. Aquí el fallo es más cruel, porque incluso el jugador se retira lesionado.
4. La forma de amonestar al jugador. Aunque cuando el chaval se quita las tarjetas del bolsillo ya difícilmente tiene marcha atrás (aunque posiblemente ya es consciente de su error) y la amarilla debe de ser mostrada antes de que el jugador abandone el terreno de juego, da la sensación de que se la enseña mientras está tendido en el suelo. ¡No hay prisa!

Claro que el vídeo también enseña cosas buenas. Por ejemplo, cómo el árbitro evita que lo rodeen. O el buen comportamiento de los jugadores, porque en otras circunstancias una jugada así le complicaría el partido a cualquiera.

De los errores también se aprende. De los propios y de los ajenos.