La agresión que se pierde el árbitro por estar dando explicaciones

¿Cuántas veces nos ha pasado que mientras atendemos a un lesionado o mientras aplicamos una ventaja, los jugadores se encaran a nuestra espalda? Son las famosas tanganas, en las que llegar un segundo tarde puede suponer que la mecha prenda y se vuelva en incontrolable. Hay situaciones en las que podemos prever que esto suceda: después de una fuerte entrada o cuando un equipo no echa el balón fuera para atender a un lesionado. Todo puede esperar: la consulta con el asistente, una explicación a un jugador, incluso la asistencia al jugador. Todo, menos tener los seis ojos en el enfrentamiento colectivo.

Como a todos nos ha pasado, entendemos al colega chileno que dirigió el partido entre Nublense y Deportivo Iquique. Expulsa correctamente a un jugador y tiene dos segundos de desconcentración letales: da la espalda a un montón de jugadores que discuten y le indica el camino del vestuario al infractor. A sus mismas espaldas, una agresión quedará impune.

Este vídeo debe hacernos recordar este principio: lo primero, disolver la tangana. El resto, puede esperar.