Balonazo donde duele, caídas y… ¡paracaidistas!

Empezamos por uno de los momentos más dolorosos que un hombre puede soportar. Lo sorprendente, es que en esta ocasión le tocó al árbitro, que en su intento de apartar las piernas para esquivar el balón, le quedó algo colgando. Bueno, colgando al principio y encogido después. El pobre no sabe si reír o llorar:

El segundo tuvo peores consecuencias, ya que el árbitro incluso necesitó asistencia médica. Sucedió en el partido entre Sao Paulo y Figueirense. No sólo hay que mirar para el balón…

Y el tercero es el menos doloroso. Sucedió en Paraguay. Deportivo Capiatá quería celebrar a lo grande su ascenso a Primera División, por lo que tenía previsto un show de paracaidismo para el entretiempo de su partido con el descendido Sportivo Iteño.

Sin embargo, una descoordinación obligó a la suspensión momentánea del partido. El árbitro del partido Carlos Amarilla ordenó un descanso para tomar agua, luego de la reanudación del juego se cobró una falta, todos los jugadores se dirigieron hacia un costado y los paracaidistas pensaron que los primeros 45 minutos habían llegado a su finalización.

Y saltaron. En pleno juego, comenzaron a caer hombres al campo de juego, por lo que el partido tuvo que ser suspendido unos minutos para que se pudieran retirar.

La caída generó risa entre los presentes, pero no fue para nada gracioso desde el punto de vista de Amarilla, a quien uno de los paracaidistas quiso abrazar, pero el juez se negó y apuró la salida de los atletas. Ved las imágenes: