Chapeau al Villarreal (por Javier Rodríguez Ten)

¿Cuántas veces los dirigentes y jugadores lanzan a los aficionados contra el árbitro, atribuyéndole o culpabilizándole de los errores de toda la temporada, por una decisión discutible?.

¿Cuántas veces decisiones arbitrales correctas se tergiversan para justificar un fracaso deportivo, aun a sabiendas de ello?.

¿Cuántas veces “la culpa la tiene el árbitro”, “el árbitro estaba comprado” o “existe una conspiración contra nosotros?.

La respuesta es muchas, desgraciadamente.

¿Cuántas veces un equipo tiene una oportunidad, como ha sido el caso del Villarreal respecto del gol de Tamudo en Vallecas (sin entrar a valorar el acierto o no en la jugada, muy difícil y ajustada, que es lo de menos) para culpabilizar a un árbitro de un enorme fracaso deportivo (motivado realmente por las lesiones que han asolado al club amarillo esta temporada)?.

Pocas.

¿Y cuántas veces un equipo, una directiva, una afición… han asumido deportivamente su mala temporada y el descenso, obviando el recurso fácil al posible error arbitral en la última jugada de la temporada, el “han jugado con nuestro pan”, “se han reído de unos profesionales”, “han tomado el pelo a una ciudad”, etc.? ¿Sin una queja, ni una voz más alta que otra?.

Sólo conozco este caso.

Enhorabuena al Villarreal. El año que viene seguro que retorna a Primera División. Ha demostrado que lo merece, más allá de los terrenos de juego.