El chófer que cambió las botas por droga… y se suspendió el partido

Que un partido se suspenda porque un equipo se presente sin calzado para jugar es extraño. Que cuando le pregunten al responsable del autobús cuente la historia de un atraco, sospechoso. Y que al final confiese que la noche anterior del partido utilizó las botas de los futbolista para meterse un poquito más de crack, surrealista.

Esto sucedió en Brasil, en la primera jornada del Campeonato Brasiliense. El Formosa se encontró con una desagradable sorpresa cuando bajaron desayunar en el hotel antes del partido frente al Brasilia: el autobús con el material deportivo del equipo había desaparecido. Eran las ocho de la mañana y el partido estaba programado para dos horas después. Pese a los esfuerzos por intentar comprar calzado de forma urgente, no hubo solución. El equipo se presentó sin calzado y el árbitro dio por perdido el partido al Formosa por una especie de incomparecencia.

Pero no sólo habían desaparecido el autobús, las botas, las espinilleras y los guantes del portero. El chófer tampoco daba señales de vida, pese a las insistentes llamadas desde el club. Cuando finalmente apareció y fue preguntado, contó que había sido secuestrado la noche anterior a 300 metros del hotel. Supuestamente, dos hombres armados le habían obligado a emborrachase y lo habían traslado en su propio autobús hacia una zona rural, donde le habían robado el material. Sólo cuando despertó pudo volver con el bus a la civilización.

Pero horas después, la investigación dio otro giro. Algo no encajaba. Y al final, Charles Amâncio Vieira confesó. La noche anterior al partido empezó con unas cervezas y ya se saben como se lían estas cosas. Ya borracho, se encontró con un vendedor de droga a las puertas del hotel. Fue a parar a la ciudad de Águas Lindas, donde ante falta de dinero, cambio las botas de los jugadores por algo de “crack”.

El conductor no era funcionario del club, sino de la empresa de transportes. Al parecer, estuvo enganchado a la droga, pero llevaba un año sin consumir. El Formosa pide ahora una indemnización, ya que sólo pudo recuperar una pequeña parte de los sustraído, mientras lucha porque el partido se pueda jugar y no se le de por perdido.

Ver para creer…