Los mil y un ataques a los árbitros gallegos
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Durante la pasada semana, La Voz de Galicia, a través de su periodista Iván Antelo, ha repasado los incidentes que han ido recogiendo tanto ese periódico como las sanciones del Comité. Los datos no dejan lugar a las dudas: en Galicia, como en otras comunidades, sigue habiendo un grave problema de violencia física y verbal. Os dejamos los casos expuestos en el reportaje y enlace a otros de este medio que completan un excelente trabajo.
Cada fin de semana, los árbitros que dirigen las categorías sénior del fútbol gallego sufren de media 36 vejaciones. Son el foco de todas las frustraciones. Fallen o no, acaban sufriendo menosprecios, insultos, amenazas, agarrones o agresiones. Sin margen para la comprensión. Jugadores, cuerpo técnico, dirigentes y hasta público se lanzan hacia ellos crispados, con un odio inyectado en sus miradas lejos de cualquier mínima razón.
La Voz ha analizado todos los partes de sanciones de Competición, desde la Tercera División a la Tercera Autonómica, y los números hablan por sí solos. 1.068 vejaciones repartidas en: 912 sanciones por menosprecio o desconsideración (artículo 106c); 38 por insultar, ofender o dirigirse de manera injuriosa (89b); 20 por amenazar o coaccionar (89c). 35 por agarrar, empujar o zarandear (89d); 14 que llegaron directamente a agredir a los colegiados (artículo 90); y 45 alteraciones del orden público. A continuación repasamos algunos de los incidentes más llamativos.
Jugador a la fuga
Agresión y huida. Una de las agresiones más llamativas fue la producida en el partido de la Tercera Autonómica que enfrentaba al Marín B y el Atlético Estación. El jugador local Víctor Rodríguez fue sancionado con nueve meses tras propinar «varios golpes en la cara» del árbitro, una vez finalizado el encuentro, cuando se encontraba en los vestuarios. El colegiado fue trasladado desde el campo de San Pedro hasta el Hospital Domínguez con un traumatismo facial, una contusión en el ojo izquierdo y erosiones en el labio. Cuando llegó la policía local a tomar declaración al agresor, ya había abandonado el campo.
¿Como un hijo?
El escandaloso Lemos-Outeiro de Rei que cruzó fronteras. Otro de los incidentes más sonados de la temporada fue el que se produjo el pasado 2 de noviembre en el campo de A Pinguela, en Monforte, en el duelo de dos equipos punteros de la Primera Autonómica que enfrentaba al Lemos con el Outeiro de Rei. El encuentro tuvo repercusión mediática más allá de Galicia porque el presidente del cuadro local trató de que se le aplicara al colegiado Salgado Paz un control de alcoholemia.
Sin embargo, había mucho más detrás de aquel curioso titular. La Federación abrió un expediente y cuatro meses y muchas zancadillas después, acordó que el árbitro había sido la víctima, pues el dirigente lemista Antonio Pérez le había agredido al término del partido. «Para mí [el árbitro] es como un hijo, y a estos hay que hablarles como tal. Eso sí, si se portan mal a los hijos hay que darles un coscorrón con cariño para enseñarlos, y probablemente le duele más al padre que al niño». Así explicaba el presidente el acto que le ha valido una inhabilitación de tres meses. Un encuentro en el que los jugadores Marcos Macía y Chema; y el segundo entrenador Juan Diéguez también fueron castigados duramente por agarrar, empujar o zarandear a los árbitros.
Un 15 de marzo negro
Dos árbitros agredidos en un mismo día en Ourense. Un mismo día (el 15 de marzo), con quince minutos de diferencia, y en apenas 40 kilómetros de distancia, el fútbol ourensano enrojeció de vergüenza al comprobar que dos colegiados habían sufrido sendas agresiones, en sus partidos correspondientes al grupo 10 de Segunda Autonómica. «No se esperaba algo así, porque además se trataba de un equipo que no se jugaba nada en el partido», trataba de explicar atónito el delegado de los árbitros en Ourense Presas López.
El Espadana-Soutopenedo fue suspendido en el minuto 61 por la agresión a Rodríguez Gómez. «Cuando se disponían a sacar de centro el cuadro local, tras el gol visitantes, el jugador Javier Torres Fernández me propinó un cabezazo en la parte derecha de la cara, en la zona del pómulo, por lo que necesité atención médica», relataba el colegiado en el acta. Antes, ya había recibido empujones por parte de Juan Fariñas. Por estas acciones, el Comité de Competición y Disciplina los sancionó con 6 meses y 4 partidos respectivamente.
El otro partido fue el A Manchica-Cartelle, con el colegiado Martínez Pérez como desgraciado protagonista. Luis del Cristo, jugador del equipo visitante, fue expulsado por decirle «eres un ladrón de mierda». Al recibir la roja, el jugador perdió los nervios y se fue directamente hacia el árbitro para darle «un puñetazo en la nuca». El partido iba 3-0 y el jugador acabó recibiendo una sanción de tres meses.
Racismo
Clausurado el campo del Meirás por insultos racistas. Esta temporada, también se ha producido el primer cierre de un campo «por la falta de represión de comportamientos racistas reiterados por un sector del público, en aplicación del artículo 65.2.4º del Reglamento Disciplinario». Fue durante el partido Meirás-Eume correspondiente a la jornada 23 de Primera Autonómica, celebrado el pasado 15 de febrero. «Me gritaron "mono, negro, vete a tu país" y eso no se debe permitir», confesaba a La Voz el árbitro colombiano Jeisson Aguado Castaño.
Medios de comunicación
El Comité de Árbitros denuncia cualquier menosprecio o insulto en prensa o en redes. Las ofensas a los árbitros no solo suceden durante los noventa minutos. Por ello, el nuevo Comité Gallego Técnico Gallego de Árbitros presidido por Iglesias Figueroa está denunciando cualquier declaración contra sus afiliados que se produzca en medios de comunicación o redes sociales. Así, ha denunciado a once jugadores del Laracha por sus comentarios en Twitter contra Extremadura Hernández; y al presidente del Baíñas (Segunda Autonómica) por las declaraciones efectuadas a La Voz en las que decía: «O día que o pille vaise acordar», en referencia al colegiado. Ambas denuncias han sido recogidas por Competición, abriendo sendos expedientes que todavía no han sido resueltos.
La última agresión
El peligro aumenta en los finales de campeonato. El Vea-Ortoño, un ejemplo. Desde el Comité Técnico Gallego de Árbitros están preocupados porque saben que en el tramo final de temporada los riesgos de agresión aumentan porque muchos son los que pierden los nervios ante la posibilidad de un ascenso o descenso. Así, el miércoles, el Comité de Competición ha tenido que sancionar con tres meses de inhabilitación al jugador del Vea Elton Rodrigues, que fue expulsado durante el partido de la fase de ascenso a Segunda Autonómica contra el Ortoño, por golpear al colegiado. El detonante fue una jugada en el área del Ortoño, con unas supuestas manos que el colegiado no vio. No se admite el error.
El mapa de la vergüenza, donde se localizan los mayores problemas: El Mapa
Declaraciones del presidente del CTGAF: Declaraciones
Comentarios
#1
Yo lo veo muy fácil. Plante arbitral en Galicia durante un mes. Y se acabn las tonterías.
#2
esta situación que se dá semanalmente en los campos que no prestan ninguna garantía se agrede sin ningún reparo ni respeto a la vida y la salud de quienes ejercen una misión muy pero muy dificil como es el arbitraje especialmente en el fútbol. y yo les comento desde mi pais Perú pero entren a internet y verán que esto es a nivel mundial, entonces estimo que la FIFA debe ver, analizar o contratar estudios al respecto porque un día no muy lejano tendremos que lamentar una desgracia.