El gol del Levante, sensacional trabajo de equipo

Haca ya tiempo que avisamos que el fuera de juego era, en ocasiones, un trabajo en la que el árbitro debe cooperar. Juzgar la posición adelantada es cuestión del asistente, pero muchas veces no puede ver la interferencia del atacante o una acción del defensa que pueda legalizar esa situación irregular.

Un buen ejemplo de ello se dio en el Levante-Valencia, con el mundialista Velasco Carballo de árbitro. Balón en largo, atacante dos metros fuera de juego. El asistente aguanta perfectamente la bandera hasta que la juega el atacante. Entonces levanta porque no se ha percatado del toque del defensa.

¿Hay fuera de juego o no? La nueva interpretación de “ganar ventaja de su posición” es clara: no existe infracción si el defensa que toca el balón juega deliberadamente el balón, salvo en el caso de una parada en un tiro a puerta. Y en este caso, está claro que no es un rebote, ya que el defensa va hacia la pelota y muy levemente la toca.

¿Se ha equivocado el asistente? Sí, pero no. Es más que entendible que no haya visto el contacto del defensa, ya que esta lejos y no cambia apenas la trayectoria. Insólito que el defensa, Ricardo Costa, se queje de que “nos paramos todos por su señal”, cuando lo único que cuenta es la decisión del árbitro, que rectificó, con buenos reflejos y una mejor posición, la decisión de su compañero.

Trabajo de equipo, clave del acierto una vez más. 

NOTA: Con las nuevas directrices de la temporada 2022/2023 tendríamos el debate de si el defensa tiene el control total de su cuerpo o si realmente quiere orientar el balón hacia atrás.