El penalti a espaldas del árbitro y la ayuda del asistente

"Lo que se debe ver no siempre ocurre cerca del balón". La Regla 5 avisa de que los árbitros no pueden centrarse exclusivamente en la zona por la que discurre el juego. Normalmente, cuando leemos esto, pensamos en acciones de conducta violenta, pero no podemos olvidarnos de las faltas tácticas, como esta que se produjo en el partido de Segunda entre Alavés  y Ponferredina (00:35 del vídeo)

Como la norma general y la lógica indican que el árbitro debe tener siempre la vista en el balón, entra en acción el trabajo de equipo. Y aquí, la concentración del asistente, que no sólo controla el fuera de juego, si no al jugador que busca el remate.  Esta jugada es muy típica cuando un atacante desborda por banda y un posible rematador espera el "pase de la muerte". Si tiene ganada la espalda, no dudéis que el defensa puede recurrir a un empujón, agarrón o zancadilla.

La resolución es perfecta, sobre todo por la rapidez con la que se toma la decisión. Para esto son maravillosos los "pinganillos": cada segundo que pase es muy negativo para poder "vender" con seguridad la decisión. Sin ellos, es necesaria una rápida mirada al asistente al ver un jugador "sospechosamente" en el suelo.

Para los que pitáis sin asistentes, esta acción es mucho más complicada, pero tenemos que intentarlo y apartar de vez en cuando la vista del balón, sobre todo cuando el jugador de banda ha superado claramente al defensa y corre ya sólo hacia el balón, lo que nos podría permitir distraer la atención de esa zona.

La jugada nos deja una enseñanza más: agarrón que empieza fuera y sigue dentro, es penalti. No se pita la primera, como dicen algunos de los falsos mitos que circulan entre jugadores y aficionados.